miércoles, 31 de marzo de 2010

Cubiletes de chispas de chocolate & café


Podría decir que pocos consejos he recibido de ella, con ésto me refiero a consejos como tales, con nombres y apellidos, muy diferentes a las constantes enseñanzas de vida que en cada minuto compartido y/o a la distancia me cubren la piel y los pensamientos.

El sábado por la mañana, mientras platicábamos, nos atiborrábamos de dulce y café en uno de sus restaurantes favoritos, me contaba por tercera o cuarta vez, la historia de mi abuelo y el camión, sonreía y asistía, tratando de actuar cierta sorpresa al escucharla, porque ella finalmente no recuerda que la historia ya ha circulado dentro de nuestras conversaciones.  Mientras lo hacía, yo deboraba un pedazo de cubilete de chispas de chocolate y ella trataba de no distraerse con mi manera tan particular de comer, se detuvo, soltó la taza de café, para decirme con un tono muy firme, seguro y con sus ojos grises con café, conectados a los mios:


-  Miré, mija.  Usted cree que la gente es buena, pero a la mera hora, todo termina siendo una mentira.  No quiero que con ésto, usted pierda la esperanza y fe, pero como siempre he dicho, la gente es jodida y pura fachada.  La confianza es fregada y las palabras se las lleva el viento.  Así que tenga cuidado, no está de más.

Luego de su afirmación, se incorporó, notó que no quedaba más cubilete, pidiendo dos más, miro hacia la ventana y siguió a través de la ventana, a una señora que llevaba a un bebé en brazos.  Para mientras, me daba vuelta su consejo/moraleja/vivencia, de por qué se había tomado la molestia en parar su relato y decírmelo con tanta gana.  

No dudo ni una sola palabra, creo que lo realista lo he heredado de ella, pero no quiero acorralar mi esperanza y fe, y darle muerte como ciertos vicios que he sacado de mi cuerpo.  Ahora sólo espero que no sea un pronóstico más, y termine soltando el cuerpo, una vez más, de un cadáver de mis contadas utopías.  

imagen:  google.com

1 comentario:

GavilaSavilaMavila dijo...

Creo, con certeza, que de ella has heredado mucho y aseguro que en estos casi dos años, sólo con ella te veo hablar tan cómoda y con tanto interés por teléfono!! Aprovechala al máximo!